Para la renovación completa de Growers Square, se tomó una pequeña plaza que carecía de identidad y circulación natural, para convertirla en un punto de encuentro accesible y central que guiara de manera intuitiva a los empleados y al público por el complejo. Esta ubicación privilegiada, cerca del centro y de una estación de tránsito rápido, ya tenía un camino natural formado después de años de viaje desde y hacia la estación. Ahora, un camino central conecta los edificios, las áreas de asientos y los jardines de la plaza.

Growers Square refleja la filosofía de la firma de arquitectura paisajista Groundworks, que consiste en contar una historia en todos sus proyectos a través del diseño. "Como diseñadores, podemos otorgarle un significado a un lugar", afirma el director Brennan Cox. "¿Cómo podemos encontrar un elemento relevante desde el punto de vista cultural o significativo desde una perspectiva histórica y trasladarlo al lenguaje del diseño?" El arte de los pueblos indígenas del área se ve reflejado en los patrones de los adoquines. Un banco personalizado de cedro recuperado funciona como guiño a la madera de antiguos bosques primigenios trasladada por las vías ferroviarias del Pacífico sur que atravesaban el área de la bahía. "La historia y la cultura sientan las bases de las formas y los materiales. Se logra una belleza intencionada… no es cuestión de diseñar algo lindo porque sí".

Las luces de áreas Rama se ubican alrededor del centro de la plaza. Cox se vio atraído por la forma simple de los productos Rama y consideró que eran "la solución perfecta para el sitio. Con los patrones de los adoquines, las estructuras de sombra y el enorme banco, no se necesitaba otro elemento notorio. Queríamos algo que no desentonara en el fondo y que, a la vez, llenara el espacio con una cantidad de luz perfecta por la noche". El corredor central se ilumina con luces para caminos Torres, que Cox también seleccionó por su "estética sutil, pero con una cantidad apropiada de brillo".