Bell Street en el centro de Seattle es el lugar de un fabuloso experimento modelado según el concepto holandés de la "calle viva": un espacio compartido por autos, bicicletas y peatones. La ciudad invirtió en infraestructura y comodidades y servicios públicos para cambiar la dinámica de esta área que estaba en decadencia y ahora cuenta con viviendas, restaurantes y tiendas minoristas. El desafío de iluminación fue proporcionar luces que ahorrasen energía tanto para las calles como las veredas y que además creasen una identidad especial para el área. La ciudad de Seattle, junto con el trabajo de las firmas multidisciplinarias SvR Design Company y Hewitt Architects, eligió las luces LED Rama en lugar de la iluminación estándar municipal para el proyecto. Las luminarias para peatones y calle de doble altura Rama montadas en postes individuales proporcionan iluminación orientada para separar funciones, reducen la cantidad de postes y ofrecen un diseño sólido sobre el valor de Bell Street para la visión de la ciudad para el futuro.