Kincaide Park, que alguna vez fue un parque desaprovechado en una zona con pocos servicios, es ahora la joya del barrio y un parque modelo para la ciudad de Quincy. El parque se encuentra en un terreno inundable y, antiguamente, tenía un pequeño arroyo que lo atravesaba y que fue trasladado a principios del siglo 20. El suelo compactado del parque no hizo más que agravar las dramáticas inundaciones que sufría la ciudad. Bishop Land Design (BLD) introdujo una serie de funciones de gestión de las aguas pluviales en la renovación, lo que incluyó la mejora del suelo, la elevación de la topografía, la ralentización del flujo de agua a través del parque y la naturalización de partes del entorno. Todo ello con el objetivo de aumentar la productividad ecológica del parque, sin dejar de ofrecer una instalación deportiva y actividades al aire libre para personas de todas las edades.

El director Scott Bishop se especializó en ecología humana en la universidad, una disciplina que BLD aplica en cada uno de sus proyectos. “Diseñamos sistemas vivos. La ecología humana trata de comprender el papel del ser humano en su entorno. Los arquitectos paisajistas integran el uso y las actividades de los seres humanos en el entorno natural. Estudiamos cómo se coordinan esos elementos vitales y cómo mejoran la salud y el bienestar de los seres humanos”. Kincaide Park cuenta con varios entornos y programación que demuestran su diseño de sistemas vivos. Un ejemplo es el almacenamiento de aguas pluviales del campo de atletismo por debajo de este, que fluye de regreso hacia zonas naturales dentro del parque. El agua del Splashpad se filtra por los humedales y riega el parque. El área de juegos para niños y las zonas de ejercicio para adultos ofrecen oportunidades para la actividad física, y los hábitats naturales aumentan la conexión de las personas con la naturaleza. Un sendero que rodea el perímetro del parque guía a los visitantes por una serie de viñetas ecológicas típicas de Nueva Inglaterra. Se informará sobre la función ecológica de las plantaciones y su papel en estos miniespacios a través de diversos carteles.

La renovación del parque se basó en la participación de la comunidad en las primeras etapas del proceso de planificación. Los vecinos querían un parque seguro, con comodidades y servicios atractivos para todas las generaciones, y que fomentara la actividad de día y de noche. La iluminación fue fundamental para lograr estos objetivos. BLD recurrió a Landscape Forms para que ayudara con la fotometría y la selección de luminarias. “La iluminación direccional fue importante para el diseño del parque y las distintas actividades”, dijo Bishop. “Los postes con varias luminarias de Arne nos permitieron situar la luminaria mientras estábamos en el lugar para colocar la luz exactamente en la dirección correcta. Pudimos mantener un nivel de luz parejo a lo largo de los senderos, sin dejar de destacar las atracciones del parque, como el área de juegos. También pudimos iluminar los árboles y el paisaje sin necesidad de utilizar luces direccionadas hacia arriba mediante el uso de postes más altos”.

Kincaide Park es un ejemplo de cómo mejorar una zona modificando sus condiciones. Ahora los vecinos pueden acceder sin dificultad a todos los lugares del parque, lo que refuerza la seguridad al aumentar la actividad y el uso. Gracias a la iluminación, el parque es también un lugar activo por la noche.